Cuando estás por iniciar un negocio por lo general estás en un rush de emociones, ideas y buenos deseos, sin embargo, para asegurar que tu negocio marche como debe es necesario tomar en cuenta lo que las leyes requieren para que puedas operar.
A continuación, te presentamos algunas cosas que debes cumplir para emprender en México con mayor seguridad y dentro del marco regulatorio.
1. Regístrate en el SAT
Sí, lo sabemos, todo mundo odia lidiar con las autoridades fiscales, sin embargo, si vas a operar un negocio es obligatorio que te des de alta ante el Servicio de Administración Tributaria (SAT), ya sea como persona física o como persona moral (empresa), además de que cumplas con las obligaciones que las leyes fiscales tienen dependiendo del régimen en el que operes.
Entre las principales obligaciones se encuentran registrarte en el Registro Federal de Contribuyentes (RFC), presentar las declaraciones provisionales y definitivas de los impuestos aplicables a tu actividad y, por supuesto, pagar los impuestos que te correspondan.
Una pregunta frecuente es ¿cuándo debo darme de alta en el SAT? La respuesta sencilla es, justo cuando inicias tu actividad económica, sin embargo, debes tomar en cuenta que existen varios regímenes fiscales, cada uno con sus características, ventajas y desventajas muy particulares, por lo que lo más conveniente es que busques asesoría especializada para contar con una estrategia fiscal benéfica para tu nuevo negocio.
2. Pon atención a tu marca
Algo común cuando un negocio está por iniciar es que busques algún servicio de diseño gráfico para crear tu logo, la imagen de tus productos o empaques y, en general, todo el kit de marca o branding del proyecto.
No obstante, algo que se suele dejar pasar es la revisión de que la marca que estás creando esté disponible y pueda ser registrada a tu favor para contar con su uso exclusivo.
El riesgo de no considerar este aspecto es que desarrolles toda una marca o, incluso, operes algún tiempo bajo ella, con un buen posicionamiento y de pronto recibas un reclamo de parte del titular de la marca pidiéndote, en el mejor de los casos, que dejes de utilizarla, pues ya estaba registrada con anterioridad y te enfrentarás de nuevo al duro proceso de posicionar exitosamente tu nueva imagen corporativa.
También puede suceder que la marca que estés pensando utilizar esté dentro de los supuestos que la Ley Federal de Protección a la Propiedad Industrial considera como no registrables, con lo que no podrías contar con el uso exclusivo de estos.
Esto puedes solucionarlo desarrollando tu marca desde un principio con asesoría de un especialista en propiedad intelectual, que trabaje en conjunto con tu equipo de diseño para contar con una marca sólida y que pueda ser registrada para que disfrutes de su exclusividad.
3. Contrata legalmente a tus empleados
Al platicar con quienes están emprendiendo o administran pequeñas empresas es común escuchar consejos como “¿para qué das de alta a tus empleados?, tú sólo págales en efectivo y listo” o “no les des contrato, nada más deposítales la quincena”, y ni qué decir de las jornadas que suelen exceder los máximos legales.
Seguir recomendaciones como estas es de las peores cosas que puede hacer alguien que está emprendiendo un negocio, pues se arriesga a perder más de lo que se estaría “ahorrando” por hacer las cosas legalmente.
De entrada, la Ley Federal del Trabajo nos sirve como una guía de los derechos y obligaciones que tienen tanto trabajadores como patrones, entre ellas, contar con un contrato laboral que, contrario a lo que se suele pensar, es protección para el patrón más que el trabajador, pues en caso de un proceso antes las autoridades, es él quien debe probar que se están respetando las condiciones laborales del trabajador.
También es importante el registro patronal y de los empleados ante el Instituto Mexicano del Seguro Social que, además de evitarte multas y problemas si un trabajador llegara a demandarte, también te servirá como protección en caso de accidentes o enfermedades de tus trabajadores.
4. Asegura los permisos y avisos para poder operar tu local
Si vas a ofrecer bienes o servicios en un local establecido, es probable que debas cumplir con regulaciones municipales, estatales y federales relacionadas con tus instalaciones.
Entre las principales se encuentran contar con el permiso de uso de suelo adecuado a la actividad que vas a desarrollar; licencias de funcionamiento en casos, por ejemplo, como establecimientos con venta de bebida alcohólicas; licencias para la instalación de anuncios exteriores (sí, también para los que están en tu local debes pedir un permiso especial), y aviso al SAT de la apertura de tu establecimiento.
5. Desarrolla unos términos y condiciones adecuados
En caso de que tu negocio cuente con un sitio web o tienda electrónica es muy importante que cuentes con términos y condiciones de los servicios o bienes que vas a vender.
Estos son como la guía o manual de instrucciones que aclaran la relación entre tú y tus clientes, por lo que deben permitir que a cualquier usuario le quede claro lo que puede esperar de ti, cuánto va a pagar, cómo va a recibir sus productos o servicios, etcétera.
Contar con términos y condiciones sólidos puede ahorrarte muchos reclamos y hasta evitar sanciones por parte de autoridades como la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco).
6. Ten visible tu aviso de privacidad
Seamos sinceros, en el siglo XXI, la información es uno de los activos más importantes de toda empresa, y los datos personales son un tesoro que muchos buscan minar, legal o ilegalmente.
Para evitar el uso abusivo de estos existe toda una rama regulatoria enfocada a la Protección de Datos Personales, y es muy importante que desde el momento en que recibas el primer dato de tus clientes cuentes con un Aviso de Privacidad que cumpla con la regulación mexicana, pues de lo contrario puedes hacerte acreedor a sanciones bastante fuertes.
Un punto básico a considerar cuando vas iniciando un negocio es que tu aviso de privacidad debe ser muy específico sobre la forma en que vas a recabar, almacenar y utilizar los datos personales que recibas, y hay algunos usos que requieren formalidades especiales, por ejemplo para enviarles correos promocionales a tus clientes debes contar con su autorización expresa en tu aviso de privacidad.
Estos son solo algunos aspectos legales que debes tomar en cuenta para iniciar tu negocio con el pie derecho. Tal vez puedan sonar algo complicados si no te es familiar el derecho, pero para eso estamos los especialistas, para ayudarte a cumplir con todas las regulaciones y que tú puedas dedicarte a desarrollar tu proyecto de negocio.